En el Ente Provincial Regulador de Electricidad (EPRE) decidieron bajar de la licitación de dos obras a la empresa mendocina José Cartellone Construcciones Civiles SA por la crisis económica por la que atraviesa que incluso la llevó a presentarse en concurso preventivo de acreedores y que generó dudas de que pudiera llevar adelante los trabajos. En una, que es la construcción de la estación transformadora San Juan, le van a entregar el proyecto a la propuesta más cercana, que es Proyección Electro Luz SRL, con un costo estimado en los 413 millones de pesos. En la otra, que es la construcción de una línea de alta tensión en 132 kV ET San Juan Sur-La Bebida, con un costo calculado en los 797 millones de pesos, en el organismo decidieron hacer una nueva convocatoria. En total se trata de obras por 1.210 millones de pesos.
“No se va a firmar ningún contrato con Cartellone por su situación económica”, dijo Oscar Trad, a cargo de la presidencia del EPRE. Con la afirmación dejó cerrada la posibilidad de que la firma mendocina, que había presentado las mejores propuestas en las dos obras, las pueda llevar adelante.
Según fuentes del sector energético, cuando en una licitación cualquier empresa que haya presentado una propuesta con chances de ganar el proceso, luego tiene algún problema, como en este caso en el que Cartellone se presentó en concurso de acreedores, si hay otra oferta por un monto cercano, se la adjudican. Es el caso de la estación transformadora. En cambio, en el otro trabajo, correspondiente a la línea de alta tensión, las otras ofertas estarían muy lejos en los montos de la de Cartellone y por eso en el ente rector han dispuesto hacer un nuevo llamado, que todavía no tiene fecha. Las que quedaron afuera, además de la firma mendocina, son Proyección Electro Luz SRL; Gieco Estructuras S.A.-IBC Construcciones; Obras Andinas SA; Sinec SA-Alumini Engenharia-Lat UTE; y Teyma Abengoa.
Cabe aclarar que, según las características y cláusulas de cualquier llamado, las empresas que quedan afuera por disposición del organismo que hizo la convocatoria, no tienen derecho a ningún reclamo ni siquiera por los costos invertidos en el proceso.
Para despejar cualquier duda, en el EPRE emitieron un comunicado en el que sostienen que frente a la decisión de la constructora de presentarse en concurso preventivo de acreedores, aclararon que Cartellone no había firmado ningún contrato con el organismo.
No obstante, ya venía trabajando en otras dos obras como accionista mayoritaria de una sociedad denominada “Interconexión Eléctrica Rodeo SA (IERSA)”, junto a CODI S.A. En ese proceso, el 12 de septiembre del 2018 la sociedad había firmado con el Comité de Administración del Fondo Fiduciario para el Transporte Eléctrico Federal y el EPRE un contrato para la ejecución de las obras de Interconexión Eléctrica 500 kV San Juan Rodeo/Iglesia. De esa obra ya se ha concretado la energización de la línea eléctrica Nueva San Juan-Bauchaceta y se encuentra en estado avanzado (65%) la ejecución de la estación transformadora Rodeo, obras integrantes de la interconexión.
Según dio a conocer la empresa, actualmente está ejecutando 15 importantes obras dentro del territorio nacional y del exterior, y se encuentra trabajando comercialmente dentro de la Argentina y en Perú, Brasil, Colombia y Centro América.
La presentación en concurso busca la reorganización de pasivos y en consecuencia asegurar el normal desarrollo de los proyectos y el mantenimiento de las fuentes de trabajo que alcanzan a más de 5.000 familias.
La situación de la empresa había generado incluso preocupación en el diputado nacional Walberto Allende, que había venido cuestionando en distintos momentos la gestión en el EPRE. Ahora, el legislador dijo que iba a pedir una reunión con las autoridades del organismo para solicitar explicaciones sobre el peligro que puedan correr los trabajos en ejecución.
Pero en el ente ya adelantaron que en el caso de las licitaciones en marcha la constructora mendocina no tendrá cabida mientras mantenga su situación financiera comprometida. Y en el caso en la que integra una sociedad con obras en ejecución, ya han completado la línea eléctrica y está avanzada la estación transformadora.
Estimación
1.210 Son los millones de pesos que suman las licitaciones en las que la constructora mendocina Cartellone ahora quedó afuera por su preocupante situación financiera.
- Las razones del concurso
Con el pedido de concurso de acreedores, Cartellone busca reorganizar sus pasivos luego de la baja de contratos de participación público-privada para obras viales firmados durante el gobierno anterior -los contratos PPP-, litigios que no se han solucionado en obras ejecutadas en Bolivia y los efectos que la pandemia ha generado en el desarrollo del negocio. Así lo dio a conocer el diario mendocino Los Andes.
“Las causas de tan difícil decisión la encontramos en la necesidad de resolver cuanto antes la compleja situación creada, esencialmente por razones ajenas al manejo empresario, que obligan al directorio de la sociedad a priorizar la aplicación de sus recursos al mantenimiento de la empresa en marcha, acudiendo a este remedio legal del concurso preventivo”, expresó la constructora en un comunicado sobre su situación.